En la fachada principal de la Capilla del Museo, podemos contemplar este imponente retablo cerámico, que cobija al Santísimo Cristo de la Expiración y a María Santísima de las Aguas.
El mismo fue pintado por Antonio Morilla Galea, mientras que el diseño del marco estuvo a cargo de Manuel Guzmán Bejarano. La corona que remata todo el conjunto es de Pablo Aguilucho.
Fue bendecido el 19 de Marzo de 1964.
En 1985, se cambió el limosnero inferior por un azulejo con la siguiente leyenda «Al cielo causa alegría al decir Ave María», como consecuencia de los continuos saqueos que sufría.
En el año 2000, la Hermandad se vio obligada a poner una lámina de metacrilato sobre el azulejo, debido a actos vandálicos.
Fuentes bibliográficas:
–leyendasdesevilla.blogspot.com