Con el nombre de Doña Elvira, se han conocido desde el siglo XV, algunos lugares del Barrio de Santa Cruz.
Los mismos formaron parte de la Judería de Sevilla, siendo propiedad de Elvira López de Ayala, que fue hija del canciller Pedro López de Ayala.
En 1833 se rotula como Arjona y en 1845 como Doña Elvira. El asistente Arjona gobierna Sevilla de 1825 a 1833. Él fue el impulsor de este espacio que se forma tras la demolición de una manzana de casas entre las Calles Ataúd, Vida, Caballos y Plazuela de los Caballos.
La Calle Ataúd, hoy desaparecida, era prolongación de la Calle Gloria, siendo conocida con este nombre desde el siglo XV. Dicha denominación tenía su origen en la estrechez y forma…
La Calle y Plaza de los Caballos estuvo ubicada entre las Calles Gloria y Rodrigo Caro, tomando el nombre por ser picadero de los Condes de Gelves, aunque también era un lugar de comerciantes de ganado.
Los documentos antiguos hacen mención de las casas, el baño, la huerta, el corral de comedias y la Plaza de Doña Elvira. Este sitio estuvo aislado, por lo que disponía de dos postigos, probablemente los de la Judería que lo separaban del resto de la ciudad.
Los Reyes Católicos, en 1484, reconocen el derecho de sus dueños a cerrar las puertas de este recinto en contra de las intenciones del Cabildo de la ciudad, que quería que fuesen públicas.
En 1888 se produce la alineación de varias construcciones, tras la apertura fue empedrada y dotada de una fuente de servicio publico. Previamente en 1848 se colocaron en la plaza algunos bancos compuestos de ladrillos y azulejos.
En 1924 tiene lugar la ejecución del plan de Juan Talavera con algunas alteraciones del Marqués de la Vega Inclán. Éste fue el creador de los parterres que rodean la parte central, en los que se ubican naranjos y otras plantas. En cuanto a las casas, son construcciones de tipo regionalista.
Tiene una función residencial, aunque se ha ido orientando hacia el turismo, ya que podemos encontrar tiendas de productos típicos además de restaurantes. En tiempos antiguos, se utilizaba para recitales, conciertos y teatros populares.
Algunos sitúan el corral de comedias de Doña Elvira en esta plaza, aunque muy posiblemente estuviera en un lugar muy cercano. El historiador Ortiz de Zúñiga hace mención a unas galerías que existían junto al corral de comedias. Las mismas eran muy semejantes a las de la Calle Abades, siendo su origen posiblemente romano.
Fuentes bibliográficas:
-Diccionario histórico de las calles de Sevilla (Antonio Collantes de Terán Sánchez).